María es una joven abogada de 26 años, independiente y con una relación estable desde hace 3 años con Toño, un agente inmobiliario 3 años mayor que ella.
Esta mañana, María, al salir de la ducha ha notado en sus genitales unas verruguitas que no había notado antes y han saltado las alarmas…: “¿será algo malo?”, “¿será una enfermedad de trasmisión sexual?”, “¿me lo habrá contagiado Toño? ”… sin apenas terminar de vestirse va a la cocina donde Toño apura el café y comienza el bombardeo de preguntas. Él intenta tranquilizarla y le explica que lo mejor es pedir cita en su ginecólogo para ir los dos juntos y ver de qué se trata.
Esta situación la viven cientos de mujeres a diario y se trata de unos de los motivos de consulta más habituales que nos demandan nuestras pacientes.
¿Qué son las verrugas genitales o condilomas?
Las verrugas genitales, también llamadas condilomas, constituyen una enfermedad de transmisión sexual (ETS) común, provocada por el virus del papiloma humano (VPH) que afecta a la piel o a las mucosas. Los genotipos que suelen producir los condilomas (90%) son el VPH 6 y el 11, que se consideran de bajo riesgo para el desarrollo otras lesiones premalignas (displasias) precursoras de algunos cánceres ginecológicos.
¿Cuáles son las zonas más habituales de aparición?
Se trata de lesiones protuberantes similares a pequeñas coliflores en áreas húmedas ubicadas en y alrededor de los órganos sexuales. En muchos casos, las verrugas son detectables a simple vista. Habitualmente se localizan en la región anogenital, en zonas de mayor traumatismo durante el acto sexual. Pueden aparecer también en pubis, regiones inguinales, perineales y perianales e incluso en el canal anal, meato uretral, vagina y cérvix. Las lesiones perianales son frecuentes en ambos sexos.
¿Cuánto dura el periodo de incubación y cuánto tiempo tarda en remitir la infección por VPH?
El período de incubación es variable, oscila entre 3 semanas y 8 meses, aunque puede ser de hasta 18 meses. El contagio puede producirse a partir de personas con infección subclínica, incluso después de haber sido tratadas. Por eso, a menudo es difícil determinar la fuente de infección. Ambos componentes de una pareja están generalmente infectados en el momento en el que a uno de ellos se le diagnostica una infección por VPH, aunque no haya lesiones visibles. La mayoría de las infecciones son subclínicas y transitorias y remiten en 1-2 años.
¿Cúal es el tratamiento de los condilomas?
Existen varias opciones de tratamiento para los condilomas, desde cremas que se aplica el propio paciente hasta exéresis de las lesiones con laser, crioterapia con nitrógeno líquido, electrobisturí… Será el ginecolog@ quien te indique cual es la mejor opción en cada caso. Pero lo más importante es la prevención y tomar precauciones a la hora de tener relaciones sexuales. El uso de preservativo es una muy buena opción.
¿Es aconsejable la vacunación frente al VPH?
Actualmente en nuestro país, la vacuna frente al VPH está incluida en el calendario vacunal para todas las niñas de 12 años. Asimismo, se indicará la vacunación a mujeres inmunosuprimidas, varones homosexuales, personas que ejercen la prostitución y mujeres que hayan tenido algún tratamiento excisional de cérvix por alguna lesión displásica.
¿Son lo mismo el Virus del papiloma humano que el Herpes genital?
No tienen nada que ver, salvo que se trata de dos infecciones de trasmisión sexual.
El herpes genital es una infección vírica producida por el Virus Herpes simple (VHS) cuya principal vía de trasmisión es por contacto sexual. Tras un período de incubación variable de hasta 21 días, aparece un cuadro clínico caracterizado por la aparición en la zona genital de unas vesículas que se rompen dejando unas úlceras que provocan importante dolor y escozor. Cuando se trata de la primera infección por el VHS, suelen aparecer ganglios inflamados en las ingles y otros síntomas como fiebre, dolor de garganta y síntomas similares a los de una gripe.
Se trata de un cuadro autolimitado que dura sobre unos 7-10 días.
El diagnóstico de la enfermedad se suele hacer por los datos clínicos y apariencia de las lesiones, pero puede confirmarse mediante estudios serológicos que confirmen la positividad del virus.
El tratamiento consiste en administrar fármacos antivirales por vía oral para acortar el tiempo de enfermedad y disminuir las recaídas. Asimismo, se administrarán analgésicos y se instruirá sobre los cuidados locales y la higiene de la zona genital.
Este VHS se quedará latente en los nervios de la zona afecta y puede permanecer ahí hasta que por un debilitamiento del sistema inmunitario, pueda reactivarse y provocar nuevas infecciones que por lo general serán de menor intensidad que la primoinfección.
El tratamiento para las recurrencias, será el mismo que para el primer episodio infeccioso.
En cualquier caso, el mejor tratamiento siempre será una buena prevención y por ello adquirir hábitos sexuales saludables será la mejor opción para combatir estas infecciones.