Los días previos a la regla no soy la misma, todo me afecta, lloro sin causa alguna, me comería todo lo que tengo en la nevera.
Cuando va a venirme la regla me siento hinchada, tengo diarrea y dolor de cabeza y en el bajo vientre.
El síndrome premenstrual es un conjunto de síntomas que aparecen previos a la menstruación, pueden variar en gravedad pero son repetitivos, desaparecen al iniciarse la regla y son mucho más frecuentes de lo que pueda parecer (afecta al 75% de las mujeres mayores de 30 años).
Se han descrito hasta 150 síntomas diferentes, pero los más habituales son:
irritabilidad, tendencia a la depresión, tristeza, acceso repentino al llanto, alteraciones en el hábito del sueño, distensión abdominal, diarrea, estreñimiento, aumento de peso, tensión mamaria, cefalea.
No se conoce la causa, lo que sí que sabemos es que es cíclico y que desaparece, y esto puede ayudarnos a sobrellevarlo mejor.
Estas son las recomendaciones durante esta fase del ciclo, que como os digo los síntomas son repetitivos y desaparecen.
- Hacer ejercicio aeróbico, salir a caminar, correr, nadar… puede ayudar a mejorar la fatiga o el estado anímico depresivo.
- Utilizar técnicas de relajación, meditación, yoga… pueden mejorar la irritabilidad, ansiedad y dificultad para dormir.
- Dieta saludable, aumentando la ingesta de alimentos ricos en calcio, líquidos e hidratos de carbono y evitando el consumo de sal, grasas, cafeína o alcohol
- Suplementos alimentarios como el aceite de onagra. Este aceite es muy rico en aceites grasos esenciales poliinsaturados de la serie omega 6, por lo que alivia el dolor mamario, mejora el estado de ánimo, la irritabilidad, el dolor de cabeza y la retención de líquidos.
- Anticonceptivos, reducen los síntomas al inhibir la ovulación.
- Antiinflamatorios pueden aliviar el dolor cólico y la tensión mamaria.
- En casos más graves deberíamos plantearnos el uso de antidepresivos o ansiolíticos.
No hay un tratamiento eficaz al completo por lo que el tratamiento no es único, se trata de una combinación de ellos, y es tu ginecólogo el que te debe guiar.