La mama es un órgano glandular muy sensible y a menudo las mujeres tienen dolor o malestar en ella.
Existen muchas causas para el dolor mamario. La más frecuente: las fluctuaciones hormonales relacionadas con el ciclo menstrual. Por ejemplo es frecuente que las mujeres sientan molestias durante el pico ovulatorio o los días previos a la descarga de la regla. Se denomina en este momento Mastodinia, y suelen ser las dos mamas las que duelan. Además en ese momento cierto grado de tensión o inflamación de la mama, el aumento de volumen (talla) de mama y algo de secreción por el pezón son síntomas frecuentes.
La cuestión es cómo de tolerable o no es esa molestia. Hay mujeres que notan una cierta presión con algunos sujetadores simplemente y otras refieren una sensación urente, como de quemazón incluso desnudas sin nada que les roce.
Además de en la menstruación, estas molestias son comunes también en otros períodos como los siguientes:
- El embarazo (generalmente en el primer trimestre y primeros embarazos)
- La pubertad (niños y niñas)
- La lactancia
- La perimenopausia (etapa en torno a la menopausia)
- El uso de anticoncepción hormonal (sobre todo la píldora y el parche)
Otras causas frecuentes de dolor mamario incluyen:
- Cambios fibroquísticos de la mama: algunas mamas son anatómicamente más ‘duras’ con más tejido fibroso de soporte y más volumen glandular. Parece como si ‘funcionaran’ más y pueden desarrollar incluso algunos quistes funcionales benignos. Pero este tipo de mama suele doler más.
- Mastitis: uno de los conductos galactóforos que va hacia el pezón se bloquea y se infecta, generalmente durante la lactancia.
- Síndrome Premenstrual: alteraciones neurohormonales ya que se sufren en todo el organismo, no sólo el dolor de regla.
- Alcoholismo y daño hepático.
- Traumatismos directos.
- Uso de medicamentos (antihipertensivos, diuréticos, antiepilépticos…).
Llegados a este punto es importante aclarar que el dolor de mama no es un síntoma frecuente relacionado con el Cáncer de Mama. Lo primero es no asustarse.
Cuidados en casa
La mayoría de estos dolores son esporádicos y transitorios, y se van a solucionar con algún Antiinflamatorio no Esteroideo en forma de comprimido oral ó tópico en pomada con la mama y un buen sujetador que sujete pero no comprima, así como con la aplicación de hielo en la mama.
Cuando el dolor es cíclico y ocurre todos los meses, deberemos revisar otras enfermedades, y puede que otras pomadas naturales u hormonales los últimos días del mes alivien la molestia.
Es importante avisar a nuestro médico si:
- Existe secreción con pus o sangre por el pezón.
- Los primeros días después del parto hay mucha dureza e inflamación y escaso drenaje.
- Existen signos de infección mamaria con rojez localizada, secreción purulenta y ulceración, fiebre…
- Descubrimos un bulto mamario con dolor que no desaparece con la regla.
- Dolor mamario persistente para el que no tengamos explicación.
Prevenir es curar. Es importante recalcar que la primera medida es utilizar un buen sujetador sobre todo en aquellas pacientes con mamas grandes. No es bueno utilizar sujetadores con aro metálico puesto que oprimen sobremanera el surco y provocan dolor glandular y muscular. Tampoco es una buena práctica el dormir con sujetador.
Igualmente una autoexploración mensual unos días después de la regla en la ducha (cuando no hay tensión mamaria) es importante para detectar cualquier cambio en la mama. Si notamos alguna diferencia, es necesario acudir a nuestro médico.