El déficit de vitamina D durante el embarazo, se ha relacionado con múltiples eventos adversos como son la preeclampsia, la diabetes gestacional, fetos pequeños para la edad gestacional y alteraciones del desarrollo neurológico del recién nacido. De hecho la guía de la Sociedad Española de Ginecologia y Obstetricia (SEGO) sobre control prenatal del embarazo normal recomienda una suplementación con vitamina D.
La vitamina D o colecalciferol se forma en la piel por medio de la acción de los rayos ultravioleta de la luz del sol y también podemos aportarla a nuestro organismo a través de la dieta (lácteos, huevos y pescado azul). La vitamina D, se somete una serie de reacciones en el hígado y en el riñón hasta obtener el producto final activo, el 1,25 dihidroxicolecalciferol o calcitriol. Este metabolito activo puede sintetizarse en las células placentarias.
Se estima que alrededor de dos tercios de las embarazadas de EEUU y un 65% de las de Canadá tienen un estado deficiente de vitamina D. Estos datos son extrapolables a las gestantes españolas. La escasa exposición al sol, combinada con la baja ingesta de alimentos con vitamina D, es la primera causa de su deficiencia.
El calcitriol parece tener un papel fundamental en el proceso de implantación intrauterina del embrión. Por tanto un déficit de vitamina D, redundará en una fertilidad limitada.
Preeclampsia
La preeclampsia es la hipertensión arterial inducida por el embarazo, asociada a la presencia de proteínas en orina y otras alteraciones debidas a una mala función placentaria. Es una de las primeras causas de mortalidad materna y neonatal en todo el mundo puesto que se asocia con riesgo de desprendimiento prematuro de placenta, prematuridad, etc.
Varios estudios han encontrado una relación inversa entre la ingesta de calcio y el riesgo de preeclampsia, hasta el punto que la OMS aconseja suplementar con calcio a aquellas mujeres con riesgo de tener una dieta pobre en este nutriente. En cuanto a la utilidad de la suplementación con vitamina D no está clara, pues algunos estudios no muestran beneficio y otros si, por lo que parece necesario que se realicen más ensayos clínicos para determinar la eficacia de la vitamina D aislada o en combinación con calcio para la prevención de la preeclampsia. En cualquier caso, y dada la relativa inocuidad y eficacia de los suplementos de vitamina D en el embarazo, no parece descabellado hacer determinaciones de los niveles de vitamina D en aquellas gestantes con riesgo de déficit de la misma y si se demuestra este, suplementar con algún preparado de calcio y vitamina D.
Diabetes gestacional
Se define como la elevación de los niveles de glucosa en sangre durante la gestación en pacientes que previamente tenían un buen control de las glucemias.
La obesidad, la edad materna, los antecedentes familiares de diabetes o haber tenido este problema en gestaciones previas, así como el déficit de vitamina D se consideran factores de riesgo para el desarrollo de una diabetes gestacional.
En las gestantes, la hipovitaminosis D, parece tener relación con altos niveles de glucosa en sangre, resistencia a la insulina y por tanto incremento de riesgo de padecer diabetes gestacional. Por tanto la administración de vitamina D en aquellas gestantes con déficit de la misma podría aumentar la sensibilidad a la insulina y prevenir la aparición de este problema.
Parto pretérmino
Se define como inicio del parto antes de la semana 37 de gestación. Una de las principales causas de que se desencadene un parto prematuro, son las infecciones dentro del amnios. Estas infecciones habitualmente se producen por la llegada de gérmenes desde la vagina o desde otros focos de infección. Estas bacterias colonizan el líquido amniótico y desencadenan la liberación de sustancias como las citoquinas que podrían ser la base de la vía de inicio del parto.
La vitamina D parece tener un papel destacado el la modulación de la respuesta inmune y en la defensa frente a las infecciones. A este respecto hay estudios que relacionan claramente los niveles bajos de vitamina D con el riesgo de parto pretérmino.
Es muy importante seguir alentando a nuestras embarazadas a que se nutran adecuadamente, a ser posible con una dieta sana y equilibrada. No parece razonable prescribir de forma rutinaria suplementos con vitamina D a todas las gestantes, pero en aquellas con riesgo de presentar una hipovitaminosis, podría ser útil hacer una determinación analítica y suplementarlas con hasta 1000 unidades de vitamina D diarias para prevenir todas estas complicaciones y reducir complicaciones gestacionales.