La creciente variedad de alimentos procesados y envasados puede dificultar nuestras decisiones a la hora de la compra. Hoy en día es posible encontrar comida y bebida en cualquier momento y en muchos establecimientos, pero a veces, son alimentos que aportan muchas calorías y poca densidad nutricional, es decir, muy ricos en azúcares y grasas pero pobres en vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales.
¿Cómo puedes saber si tu elección es acertada cuando vas a comprar?
Fíjate en las etiquetas y utiliza la información para elegir las opciones más saludables.
La etiqueta de los alimentos informa de su composición y, en algunos casos, de su valor nutricional. Resulta pues una buena ayuda para elegir los más saludables. La lista de ingredientes detalla los componentes del producto de mayor a menor proporción, incluidos los aditivos, su función y nombre o código de identificación (letra E seguida de un número).
Según la legislación vigente es obligatorio indicar además de los ingredientes, los alergenos conocidos en caso de tenerlos, las características físicas del alimento, el peso neto del producto preenvasado, la forma de almacenamiento e identificación del fabricante. También debe llevar fecha de caducidad o de consumo preferente.
De forma voluntaria, algunas etiquetas contienen información nutricional sobre la energía, carbohidratos, proteínas y grasas contenidos en el alimento envasado. La mayor parte de fabricantes españoles etiquetan sus productos con el sistema de tabla nutricional o de Cantidades Diarias Orientativas (CDOs).
Tabla nutricional: muestra la cantidad de energía, proteínas, carbohidratos, grasas y algunos casos también azúcar, grasa saturada, fibra y sodio por cada 100g o ml de alimento, o por ración o paquete.
Las Cantidades Diarias Orientativas (CDOs): proporcionan información nutricional por ración de producto, indicando habitualmente la cantidad de energía (en calorías) y otros nutrientes junto con el porcentaje que una ración o 100g de dicho alimento representa sobre el consumo diario recomendado.
Ya ves que leyendo las etiquetas puedes tener una información muy útil para comparar distintos productos y elegir el que más te convenga para ti y tu familia.